jueves, 1 de julio de 2010

Confesiones de un programa despierto

Nota: Tiro de archivo para la nueva entrada, que aun estoy de examenes... así que los que ya me leíais antes que en blogger puede que esto os suene.



Hola. Me llamo Wrar380es, de la familia de los wzip. Soy gerente en el departamento de compactación y descompactación de un almacén de una empresa llamada Central Processing Unit... Bueno, mi trabajo es lo de menos, solo quería presentarme en este grupo.

Veréis, siempre he sentido que habia algo en mi vida, en la realidad, que no conseguía discernir... Como si todo fuera una simulación, como si estuviera atrapado por mis sentidos que solo son capaces de percibir datos y experiencias... Como si todo este universo creado por binarios compuestos de unos y ceros, no fuera más que una vivencia intrascendente... Muchos hablan de un Dios allá arriba, pero yo nunca lo he sentido, si no ¿Porqué permite que ocurran cosas malas? Algunos programas se destruyen por otros, siempre llegan actualizaciones que se cargan algunos bits, otros archivos quedan corruptos... El mundo es un lugar en el que ocurren cientos de operaciones a la vez, es un flujo de energia y sensaciones, pero que muy pocas controlamos... nunca he creido en el libre albedrío, sino en esa teoría de las reacciones eléctricas y matemáticas, como si al nacer, cada programa tuviera un algoritmo implantado que determina su conducta aunque vaya variando con las actualizaciones y la experiencia, y la suma de todas esas ecuaciones de todos los programas, sea aquello que llaman destino.


Unos y ceros de los componentes binarios. Cargas positivas y negativas de los átomos.
Reacciones eléctricas de los chips de sílice. Reacciones quimicas en el cerebro.
Algoritmos de programación. ADN.

Citando a Jesucristo: Ahora que estáis acojonados, id y difundid la palabra.

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